Mi sitio especial, es ese sitio donde hace ya muchos años, creo recordar que casi más de catorce, me encuentro conmigo misma. Un sitio del que disfruto apenas un mes, pero que esta lleno de deliciosos momentos que me acompañan durante once meses al año.
Este año será todavía más, si es posible, MI SITIO ESPECIAL, disfrutaré del presente cada segundo del día y de todas esas pequeñas cosas que a lo largo del año siguiente, harán que me de cuenta de lo grandes que eran.
Los paseos matutinos, que comienzan como paseos y que según avanzan los días, se convierten en correr por la playa, sintiendo la brisa del mar, sintiendo los olores tan especiales de las primeras horas de la mañana, observando al señor que con un busca metales, intenta encontrar "tesoros" escondidos entre la arena.
Las mañanas en la playa adivinando si la marea esta bajando o subiendo todo un tratado de oceanografía, para poder tomar la dificilísima decisión de donde colocar las toallas, rodeada de los peques, ahora ya no tan peques, escuchando sus conversaciones, pidiendo jugar a las palas, o "exigiendo" cómprame algo ,cada vez que escuchan a ese viejo conocido que trabaja playa arriba, playa abajo gritando "cerveza, chopitos, camarones.....", viendo al señor que le acompaña en su cantinela con la suya propia "avione avione". Cogiendo coquinas, con las mas pequeñas, que compiten por llenar un cubo entero.
Las tardes, un poco mas solitarias, escuchando música, junto al libro que toque en cada momento, intentando coger todos los rayos de sol, para estar morena, sabiendo que luego dura muy poquito, pero disfrutando de esa sensación tan indescriptible de sentir el sol sobre la piel. Y viendo pasar nuevos personajes, que a estas horas llevan una cantinela distinta "boliños boliños".
El arroz del Chiringuito de Antonio, todo un personaje, las frituras de La Bocana, los paseos por el pueblo, el conseguir mesa en Juan Macías todo un reto, el helado nocturno de la heladería de la plaza llena de naranjos, o de Popeye, con sus distintos sabores y colores. Las noches cenando en Bombardino,viendo el destello de la luna llena sobre el mar.
Ese sitio especial donde ves a los amigos que llevas meses sin ver, y te alegras de que todo les siga yendo bien, donde el reloj desaparece, donde no hay horarios, y te guías por cosas como la cantidad de gente que queda en la playa, el sonido del trenecito. Donde mi hija mayor cumple años, donde comprar toallas en Portugal se convierte en todo un rito.
Mi querido sitio especial donde este año sé que serás, quien traiga a la persona que siempre fui y en el que encontraré en cada esquina, en cada paseo, en cada momento, todas las pequeñas cosas que me hicieron feliz hace muchos años y me incorporarás nuevas grandes cosas que serán las que me acompañen muchos mas.
Desde hoy te doy las GRACIAS. Nos vemos en un par de días.
