lunes, 28 de marzo de 2016

¡¡¡Bailar Mola!!!







No os lo vais a creer, pero yo nací, crecí y trabajé en un mundo que ya no existe, sin teléfonos móviles ni Internet. ¿Cómo conseguimos sobrevivir? Pues la verdad es que, hasta donde yo logro recordar, la vida en aquellos perdidos tiempos no era tan mala como los nativos digitales podríais pensar.

Nuestro ordenador no era la borgiana Biblioteca de Babel (¿ordenador? ¿Qué ordenador?). No teníamos a un golpe de click todos los museos del mundo. Tenía que ir físicamente a Figueres para ver mi cuadro favorito desde Madrid, y varias veces hice ese viaje. En cuanto a los trabajos escolares, no contábamos con ninguna Wiki que hiciera por nosotros la mitad del trabajo (la mitad, dice. ¡Jajaja!). Reunir la bibliografía necesaria ya era un esfuerzo enorme (y un gran gasto). Y lo de ligar… Bueno, de ligar ya ni os cuento. Sin Tinder ni nada. Teníamos que (no quiero ni decirlo)…Teníamos que bailar.

Esos eran sólo una parte de los problemas que padecíamos los nativos analógicos por aquel entonces. Pero visitábamos museos, hacíamos unos trabajos bastante respetables y, lo creáis o no, de cuando en cuando, hasta ligábamos.

No me malinterpretéis, por favor. No es nostalgia lo que quiero transmitiros. Estos son tiempos estupendos. Me alegro mucho de formar parte de ellos de forma activa. No soy “nativa digital”, pero casi puede decirse que soy “bilingüe”.  Humildemente considero que me he adaptado bastante bien y, además, con gusto. 

Pero, en muchas empresas  empieza a instalarse una especie de dicotomía que me resulta preocupante. Analógicos contra digitales, así, en dos bandos opuestos, uno frente a otro, como si fuera un partido de fútbol. Pero no lo es. Cualquier organización que luche contra sí misma está condenada. No se trata de bandos, sino de destrezas, habilidades y especializaciones diferentes y, en todos los casos, necesarios.

Así, mis queridos amigos nativos digitales, necesitamos vuestros profundos conocimientos sobre los misteriosos intríngulis de la red; vuestra santa impaciencia, debida a la inmediatez con la que habéis aprendido a recibir la información, y vuestro carácter combativo, fruto de vuestra propia vida, participativa e interconectada.

Pero también necesitamos el talento analógico. La comprensión global de los modelos de negocio, la capacidad de gestionar procesos complejos y multidisciplinares, unido a la paciencia para desarrollar tareas de largo aliento que definirán la posición de la compañía en un futuro más allá del mes que viene, son valiosas aportaciones que, por lo general, proceden de la buena y experimentada gente analógica.  

Por otro lado, el liderazgo también ha cambiado. Ya no vale ejercer sólo una posición de autoridad.

No seremos buenos líderes si no somos capaces de identificar los valores que queremos mantener y preservar, y descartar aquellos que son prescindibles. Esto es algo que solo podrán (podremos) hacer los “bilingües”, sean nativos digitales o analógicos, pero con talentos procedentes de ambos mundos. Se trata de un proceso conservador y progresista a la vez: tenemos que conservar aquello que funciona y debemos ser capaces de encontrar aquello que nos permitirá sobrevivir en el futuro. O perecer.

Liderar equivale a conversar. Hoy, más que nunca, necesitamos participar activamente en las conversaciones que mantienen nuestros clientes, nuestros proveedores y nuestros propios compañeros. A través de esas conversaciones podremos entender cómo nos afectan los cambios a nivel personal, y a nuestras empresas, saber qué hay que hacer y dejar de hacer, qué nuevos productos y servicios demandan nuestros clientes, y qué tipo de empresas debemos diseñar para atraer y retener el nuevo talento digital.

Como directivos debemos cambiar nuestros modelos mentales para hacer frente a los nuevos cambios y renunciar a lo que hasta ahora nos ha servido para convertirnos en líderes.


Es una tarea complicada, pero los que procedéis del mundo digital de forma nativa también deberéis asumir valores, conocimientos y destrezas propios del mundo analógico. Aunque esto no debe preocuparos. Os voy a contar un secreto: bailar mola.

lunes, 8 de febrero de 2016

Esta Permitido...


...Equivocarse

Sí, equivócate, y no te preocupes por ello, pero nunca te quedes en el suelo. Después de caerte,¡te levantas y continúas!

Porque sí, y tenlo claro, esta permitido caerse, cometer fallos y equivocarse, mientras lo aceptes, te levantes con mas fuerza y sigas caminando.


Y así nos lo dice Pablo Alborán en su canción "Está permitido" que da título a mi entrada. 

Con una maravillosa sonrisa, nos cuenta que con una actitud positiva y valiente, viviendo el presente, y con la mente puesta en disfrutar de lo que queda por vivir y por encima de todo procurando ser cada día mejores personas.

Con un si por delante, sin miedo a los errores, lo importante es caminar. Porque, ten por seguro, que aún te quedan muchos pasos por dar, fallos que solucionar, pero sobre todo preciosos momentos que disfrutar.

Una delicia de canción que es, toda una lección de optimismo.






Qué importa si todo acabó,
si lo que llega es aún mejor
no vivas del recuerdo, amor.

Nos queda mucho por vivir,
hay tantas cosas que decir
y quieras o no quieras hoy…

Voy a brindar por lo que fui,
por el presente y lo que queda por hacer.
Aprenderé a decir que sí,
cuando siempre dije no.
Está permitido equivocarnos.

Y hoy me he levantado
pensando en tus abrazos,
buscando una sonrisa
que me nuble los fracasos.

Que nadie nos reproche
que no lo hemos intentado,
que caiga ya la lluvia
y deje el asfalto mojado.

Hoy me he levantado
cantándole a los vientos
que el mundo gira en torno
a lo que decidamos todos.


Y todos encontramos
un motivo para ser,
al menos esta noche,
mejor que lo que fuimos ayer.


No queda nada que perder,
aunque nos cueste igual que ayer,
sonríe una y otra vez.
El tiempo solo borrará
lo que no pese de verdad,
que nuestras ganas de vivir sean un volcán.

..

viernes, 13 de noviembre de 2015

Muy femenina, como no podía ser de otra manera, ¿Verdad?



Sexy, sensual, femenina, dulce, atrevida y hasta incluso un poco salvaje.....





Preciosa la nueva campaña de women'secret y preciosa la colección.
#wearsexywomen

sábado, 24 de octubre de 2015

Photograph







Loving can heal,
Loving can mend your soul,
And is the only thing that I know.
I swear it will get easier,
Remember that with every piece of you,
And it's the only thing we take with us when we die.






sábado, 26 de septiembre de 2015

Love Me Like You Do







So love me like you do, lo-lo-love me like you do
Touch me like you do, to-to touch me like you do
What are you waiting for?



lunes, 21 de septiembre de 2015

Día Mundial del Alzheimer






"Si algún día tengo Alzheimer, procurad que no olvide mis recuerdos. Porque al final, es lo único que me llevaré cuando ya no esté"



miércoles, 5 de agosto de 2015

Tal vez...




Una preciosa reflexión para cualquier momento vital. Para mi, hoy es una reflexión que me ayuda a saber, que siempre intenté hacer lo mejor y lo máximo que pude.



Tal vez yo envejezca demasiado rápido.
Pero lucharé para que cada día haya valido la pena.
Tal vez sufra innumerables desilusiones en el correr de mi vida,
Pero haré que ellas pierdan importancia ante los gestos de amor que encuentre.
Tal vez yo no tenga fuerzas para realizar todos mis ideales.
Pero jamás me consideraré derrotado.
Tal vez en algún instante sufra una terrible caída.
Pero no quedaré por mucho tiempo mirando hacia el suelo.
Tal vez un día el sol deje de brillar.
Pero entonces me iré a bañar en la lluvia.
Tal vez un día yo sufra alguna injusticia.
Pero jamás asumiré el papel de víctima.
Tal vez tenga que enfrentar algunos enemigos.
Pero tendré humildad para aceptar las manos que se extenderán en dirección mía.
Tal vez una de esas noches frías, yo derrame muchas lágrimas.
Pero no me avergonzaré por ese gesto.
Tal vez con el tiempo, yo perciba que cometí grandes errores.
Pero no desistiré de continuar mi camino.
Tal vez con el correr de los años, pierda grandes amistades.
Pero aprenderé que aquellos que realmente son mis verdaderos amigos, nunca estarán perdidos.
Tal vez algunas personas deseen mal para mí.
Pero continuaré plantando la semilla de la fraternidad por donde sea que yo pase.
Tal vez entristezca al concluir que no consigo seguir el ritmo de la música.
Pero, entonces, trataré que la música siga el compás de mis pasos.
Tal vez yo nunca consiga ver un arcoíris.
Pero aprenderé a diseñar uno, aunque sólo sea dentro de mi corazón.
Tal vez hoy yo me sienta débil.
Pero mañana recomenzaré de nuevo, aunque sea de una manera diferente.
Tal vez no aprenda todas las lecciones necesarias.
Pero tendré la conciencia que las verdaderas enseñanzas ya están grabadas en mi alma.
Tal vez me deprima por no ser capaz de saber la letra de aquella música.
Pero quedaré feliz con las otras capacidades que poseo.
Tal vez la voluntad de abandonar todo se vuelva mi compañera.
Pero en vez de huir, correré tras aquello que anhelo.
Tal vez no tenga motivos para grandes celebraciones.
Pero no me dejaré de alegrar con las pequeñas conquistas.
Tal vez yo no sea exactamente quien me gustaría ser.
Pero pasaré a admirar quién soy.

Porque al final sabré, aún con incontables dudas,
que soy capaz de construir una vida mejor.
Y si aún no me convencí de eso, es porque como dice aquel dicho: “todavía no llega el fin”.
Porque al final no habrá ningún “tal vez” y sí la certeza...
de que mi vida valió la pena y que hice lo mejor que pude.
(Aristóteles Onásis)